1940,
15 episodios, 285 minutos, director no figura en títulos, con Victor
Jory como Spike Holland / The Green Archer, Iris Meredith como Valerie
Howett, James Craven como Abel Bellamy, Robert Fiske como Savini,
Dorothy Fay como Elaine Bellamy, Forrest Taylor como Parker Howett, Jack Ingram como Brad
En 1923 se publicó la novela de Edgar Wallace, dos años después se estrenó el serial producido por Pathé Enchange. Una década larga el personaje se mantenía vigente, al menos para intentar un serial sonoro protagonizado por Victor Jory, al comienzo de las acciones como el investigador de seguros Spike Holland.
Abrevando del título, de algunos nombres de personajes y algunos elementos de la trama de la novela la historia para el serial es original.
Abel Bellamy, aparentemente un ciudadano respetable pero en realidad un ladrón de joyas, interpretado por James Craven incrimina a su hermano Michael por un crimen y toma el control de una fortaleza medieval trasladada a Estados Unidos de América, el Garr Castle. Acondicionado para que allí fije su centro de operaciones para su accionar non sancto.
Hacia él llega en su rol de investigador de seguros (buscando la ruta del robo de las joyas) Holland, ayudado por su otra personalidad, The Green Archer, un habitante inesperado del castillo, para poder en caja a un hombre que no duda en cometer todo tipo de fechorías contra familiares y amigos de su hermano.
Iris Meredith como Valeria Howett, la cuñada del injustamente incriminado (y encerrado en el castillo), la principal figura femenina, la encargada de contratar al investigador, alquilando además una vivienda contigua donde hicieron base para descubrir los tenebrosos sucesos dentro del castillo.
Pasadizos secretos, túneles, trampas por aquí y por allí y el enigmático hombre verde con un arco, algunos de los curiosos elementos trasplantados de los viejos castillos europeos a los Estados Unidos actuales.
Jerry Blake dixit: "Como
casi todos los seriales de Horne, puede ser fácilmente criticado por su
falta de coherencia tonal y la inutilidad de su trama, pero se puede
disfrutar fácilmente por sus elementos de comedia poco convencionales. Tiene
las payasadas de James Craven, Kit Guard, Robert Fiske, Jack Ingram,
Fred Kelsey y compañía para mantener al público sonriendo a través de
quince capítulos de sucesos que de otro modo serían bastante poco
interesantes"
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